Hay corrientes artísticas en las que prevalece el orden. Otras, en cambio, son de natural caóticas. Sin embargo los grandes maestros pueden presentar un caos aparente con su propia lógica interna ¿No es maravilloso?
Jason Pollock
Como no somos especialistas en arte, nos vamos a atrever decir algo como lo siguiente: de entre las obras que son aparentemente manchas de pintura hay una profundamente conmovedoras y otras que nos hacen desear ir a la tlapalería por solvente y ponernos a limpiar la pared. Las que acompañan este post pertenecen a la primera categoría. Sentimos que no necesitamos saber nada de arte para apreciar la magia de un Pollock, un Miró, un Tamayo.
Rufino Tamayo
No cualquier mancha de pintura es interesante y las que si lo son nos hacen desear vestirnos como si hoy no fuéramos a trabajar en la oficina sino en una galería. ¿Se unen al juego?
Miró
Mondrian
